la meditación...

consiste en liberarse de las garras de los sentidos y de la mente interior para lograr el descanso de la mente.
La mente contiene surcos, samskaras, que se forman cuando determinados pensamientos (vrittis), se hacen habituales. El propósito inmediato de la meditación es crear surcos mentales nuevo y positivos.
Ahamkara, el ego, es el aspecto auto-arrogante de la mente y es el mayor obstáculo para la tranquilidad. Otros obstáculos que presenta la mente son duda, aburrimiento, sueño, malestar fisico, pensamientos negativos, prisa.
La meditación es una práctica por medio de la cual se propicia una constante observación de la mente, el comprender que los pensamientos dominan la mente, permite al practicante convertirse en espectador de su propia mente, (shakshi)
Una vez que hemos aprendido a relajarnos y calmar la mente, la meditación nos puede servir para acceder a niveles más profundos y espirituales de nuestro ser, de manera directa y concreta y permite alcanzar a una nueva era de florecimiento para el individuo y para toda la humanidad.

Obstáculos a la hora de meditar…
La meditación es un ejercicio que se transforma en hábito esencial para la vida sana del ser humano. Pero esto no se fácil lograr debido a la educación y al paradigma al cual pertenecemos, y por esta razón, encontramos obstáculos al momento de realizar la meditación.
Estos son obstáculos y algunos consejos para sortearlos:
1. Duda.
Anotar en un papel todas las dudas que surjan sobre el tema así el practicante descubrirá, luego de un análisis detallado, que muchas de las dudas son infundadas y algunas incluso ridículas.
2. Aburrimiento.
La meditación desemboca en "aburrimiento" para la mente super activa. Aquietarla es nuestro objetivo. Aceptar el aburrimiento es un paso que permite continuar con la meditación.
3. Sueño.
Para evitar la somnolencia podemos comprobar que la postura es la correcta y cómoda, mantener los ojos más abiertos y si es preciso, levantarse y practicar meditación caminando (o una o dos asanas de estiramiento apropiados) durante unos minutos, antes de sentarse de nuevo.
4. Malestar físico.
Otro de los obstáculos para realizar las liberación mental es las molestias que comienza a sentir el cuerpo cuando se dispone a meditar. Cuando estas molestias aparezcan, es óptimo tomarlas para adentrarlas e incluirlas en la meditación, por ejemplo: sentir el picor, respirar a través de él y continuar con la meditación. Esta sensación de picor puede dotar de energía adicional para concentrarse mejor. Si la sensación se escapa de control, sencillamente ¡rascarse!
5. Pensamientos negativos.
La meditación puede destapar las tendencias negativas que residen en el subconsciente, es sano encontrarnos abiertos a nuestras negaciones, tomarlas y aceptarlas, una vez logrado esto, cultivar el opuesto exacto a estos pensamientos.
6. Prisa.
La meditación es una ejercicio en donde el practicante aprende a cultivar la paciencia.
7. Santurronería.
Comprender verdaderamente lo que es la meditación y sus objetivos, permite ser conciente y disfrutar de los logros de la misma, sin caer en la ilusión de ser “especiales” y elevados. La humildad es una característica importante a experimentar en la vida de un yogui.
8. Caza fenómenos.
Muchas veces en la necesidad de sentirnos “especiales”, “iluminados” caemos en ficciones literarias, para evitar estos “delirios”, debemos mantenernos concientes y en la verdad con compasión, amor y humildad.
9. Ilusionismo.
La meditación muestra exactamente cuánto de nuestra realidad ordinaria se halla construida por la mente. A partir de la práctica, comenzar a comprender que el yoga abarca todos los aspectos de la vida, permite un desarrollo más integral con uno mismo, y por ende con el resto, con la extensión nuestra.